Pronto se olvidó Mahoma de su tío Abu-Taleb, quien le dio más instrucción que sus propios padres. Abu-Taleb, en cambio, no perdió la memoria y dicen que jamás volvió a enseñar la verdad a los niños.
No puede recordar bien cuando estalló la bomba. Sí puede precisar que primero fue el humo, después el ruido ensordecedor. No puede recordar a quién encontró primero, si a su madre o al hijo. No puede recordar en qué momento comenzaron a ulular las sirenas y los gritos y los ayes de dolor. No puede recordar cuántos años tenía. Sabe sí que eso fue hace mucho más de un día.
¿Recuerdas, Olivia, cuando salíamos a jugar por las calles de Montparnase? ¡Cómo nos reíamos de las travesuras que le hacíamos al barrendero! Y después, a comer nuestras croissants y seguir subiendo y bajando escalinatas. Bueno, Olivia: me casé con el hijo del barrendero Michele. Tanto corrernos, tanto corrernos, su hijo me alcanzó.
Recorta los olvidos con una tijerita y los va pegando en el álbum. Cuando llena la última página, advierte que todavía le quedan unos cuantos…
Cuando conocí a Hemingway él todavía no había descendido al último escalón del alcohol. Trabajaba de noche y de día dormía. Aunque a veces se lo veía deambular por las calles de La Habana o subido a su lancha con el reel en las manos. Lo visité para preguntarle cómo se hacía un escritor. Me respondió que lo hace la vida; pero me advirtió de inmediato: lo hace con crueldad. Busque otra profesión.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Archivo del blog
-
▼
2010
(45)
-
▼
diciembre
(45)
- Sin título
- Faces y antifaces (De temporalidades y destiempos)...
- Destiempos
- Crónicas
- Musicalis
- De contrastes claroscuristas
- Los miedos
- Abismos
- Demonios luciferinos
- Gastronomía francesa
- Trueques
- Escrúpulos
- De latitudes
- De amores
- Sensaciones
- Calendarios
- Iluminaciones
- Se trata de cofradías
- De obsesiones y reclamos
- Horrores del Paraíso
- De los espejos
- Vacíos
- De maquillajes y snobismos
- Avisos clasificados
- Libro de los Guinness
- De juegos y juguetes
- Historias japonesas
- Circularidades
- De memorias y olvidos
- Estampas ecuestres
- De muertos y moribundos
- Celebración del pesimismo
- De lo intangible
- Sólo trampas
- Desequilibrios
- Rompecabezas
- Del Libro de los horrores
- Interpretaciones de la duda
- De misántropos y raros
- Jardines y jardineros
- Autorretratos
- Se trata de explicaciones
- De vicios e imperfecciones
- Hacia el crepúsculo
- Inocencias y culpas
-
▼
diciembre
(45)
Acerca del autor

Biobibliografía
Poeta, ensayista, crítico de arte, Jorge M. Taverna Irigoyen nació en Santa Fe. Ha publicado una decena de libros de poesía, crítica e historia del arte, mereciendo numerosos premios por su labor. Publicó sus narraciones breves bajo el título Historias verosímiles en la revista Letras de Buenos Aires y en el suplemento cultural de El Litoral de Santa Fe. Fue Director Provincial de Cultura, director y fundador del Centro Trandisciplinario de Investigaciones de Estética de Santa Fe y presidente de la Asociación Santafesina de Escritores. Es miembro de la Asociación Internacional de Críticos de Arte y Presidente de la Academia Nacional de Bellas Artes.
Seguidores
Con la tecnología de Blogger.
No hay comentarios:
Publicar un comentario